martes, 22 de noviembre de 2011

Aporte de Mario Tatis desde Cali - Colombia.

Una señora y su hijo de 10 años, están comiendo en un restaurante,
En un descuido, el carajito se mete una moneda en la boca y se atraganta.
La madre intenta hacerle escupir la moneda golpeándole la espalda, dándole palmadas en el cuello, sacudiéndolo, sin éxito. 
El niño comienza a dar muestras de asfixia y la madre, desesperada, comienza a gritar pidiendo auxilio.
Un señor se levanta de una mesa cercana, y con pasmosa tranquilidad, sin decir palabra alguna, le baja los pantalones a la criatura, toma sus
pequeños testículos, los aprieta con fuerza, y tira hacia abajo   violentamente..
Automáticamente, el niño , ante el dolor irresistible   escupe la moneda, y el señor, con la misma pasmosa tranquilidad con la que se acercó, regresa a su mesa sin decir palabra.
Al rato, la señora, ya tranquilizada, se acerca para agradecerle que haya salvado la vida a su hijo, y le pregunta:
-¿Usted es médico?
- No señora, SOY FUNCIONARIO DE LA DIAN (Dirección Nacional de Impuestos), Experto en apretarle las Güevas a   los contribuyentes hasta sacarles la última moneda.... !!!!!!