domingo, 6 de septiembre de 2009

Aporte de Rosario Ramírez desde Cali - Colombia.

Dos bandidos llegan a un pueblo y entran en una casucha arrastrando a un tipo.
Adentro, un Chino de 1,90m y 120 kg., asesino de lo peor , limpiandose las uñas con un cuchillo enorme. Uno de los tipos le dice:
-Chino, el jefe pidió que le des por el culo a este guevon, para que aprenda a no hacerse el macho con nuestra banda.
-Dejenlo ahi en un rincón, que mas tarde me encargo de él.
Cuando los malandros se van el tipo dice:
-Por favor Señor Chino, no me haga eso, despues de culeado mi vida se termina, tenga piedad por el amor de Dios..
-Callate!! y quedate quietito ahí
Al rato vuelven los bandidos con otro pobre Cristiano:
-Chino, el jefe pidió que a este le cortes las dos manos y le perfores los ojos, para que aprenda a no tocar la caja de la venta de drogas.
-Dejalo ahí que dentro de un rato me encargo.
Una hora después traen otro pobrecito.
-Chino, a este le cortas la verga y la lengua para que nunca mas se meta con las mujeres del pueblo.
-Listo, dejenlo ahí en el rincón con los otros.
Finalmente traen a otro.
-Chinazo, a este lo cortas en pedacitos y mandas cada pedacito para la familia.
En ese momento, el primer tipo le dice al Chino, en voz bien baja:
-Señor Chino, por favor no se vaya a confundir: ¡acuerdese que el de la culiadita soy yo!!!!!!!