miércoles, 1 de julio de 2009

Aporte de Rosario Ramírez desde Cali - Colombia.

Había un tipo que trabajó como un burro toda su vida, para acumular fortuna. Un día le dijo a su esposa:
-El día que me muera, quiero que me entierres con todo mi dinero. ¿Me lo prometes?.
-Claro mi vida.
Al tiempo el tipo murió, y después de la ceremonia, antes de bajar el ataúd a la fosa, la esposa dijo:
-Un momento, falta algo.
Tomó una cajita que traía en la mano, abrió el ataúd, y la puso adentro.
Su mejor amiga, le dijo:
-No creo que hayas sido tan bruta, de haber cumplido la promesa....!!!
La leal esposa contestó:
-Yo soy cristiana, y no podía romper la promesa a su última voluntad .
-¿¿¿O sea que pusiste toda la plata ahí?????
-Claro que sí... Cogí todo el dinero, lo conté, lo deposité en mi cuenta y le giré un cheque por la cantidad exacta.
-.....Si el hijo de perra lo puede cambiar allá, que se gaste todo su dinero.…SINO SIGO GASTANDOLO YO ACÁ.