miércoles, 24 de junio de 2009

Un grupo de hombres está en el gimnasio de un club y suena un celular. Uno de los hombres contesta:
-¿Si?¿Querido, eres tú?
-¡Se escucha horrible! ¡Hola, hola!
-¿Estás en el gimnasio?
-¡Sí!
-Estoy frente a la vidriera de una peletería viendo un tapado de visón precioso. ¿Puedo comprármelo?
-¿Y cuánto cuesta?
-Como 5.000 dólares.¡
-Dale!, y cómprate también un bolso que haga juego, amor mío.
-Bueno, esteee, resulta que también pasé por un concesionario, y pensaba que ya es hora de cambiar el auto, así que entré y pregunté. ¿Ah que no sabés qué?, resulta que tienen un BMW, en oferta y es el último que les queda.
¿Y de cuánto es esa oferta?
-Sólo 60.000 dólares, ¡Y es divino!.
-Buuueno, cómpralo, pero que te lo den con todos los accesorios, y si sale un poco más, como situación excepcional, no me voy a enojar.
La mujer, viendo que hoy todos sus pedidos "colaban", decidió arriesgarse:
-Cariño, ¿Te acuerdas que te conté que mamá quería venirse a vivir con nosotros? ¿Te parece bien que la invite por un mes, a prueba, y el mes que viene lo volvemos a hablar?
-Mmmm, bueno, está bien, ¿Pero no me pidas nada más, ¿Eh?
-Sí, sí, está bien, ¡Ay cuanto te adoro, mi amor!
-Yo también te quiero.
-Un besito y te dejo.
-Chau.
Al colgar el teléfono, el hombre se gira al grupo y pregunta:
-¿Alguien sabe de quién es éste celular?